El pasado sábado 6 de Febrero, con motivo de la conmemoración del atentado de Holguín (1 de febrero) y como viniendo siendo tradición anual, los Seglares Claretianos de Bética (Delegación de Sevilla) organizamos un encuentro de las cuatro ramas de la Familia Claretiana en la Parroquia San Antonio Mª Claret, de Sevilla. Estuvieron presentes varios integrantes de los Misioneros Claretianos, Misioneras Claretianas, Filiación Cordiomariana y Seglares Claretianos de distintas partes de nuestra provincia. Tuvimos oportunidad de ponernos al día sobre las novedades que han marcado lo que llevamos vivido desde verano, transmitiendo las modificaciones que se están produciendo en cada rama a nivel organizativo de provincias, así como los motivos de estos cambios.
En segundo lugar, se quiso hacer especial mención a cómo se está enfocando la vivencia del Año de la Misericordia, decretado por el Papa. Antes de vivir juntos la eucaristía en el seno de la Parroquia de Sevilla, tuvimos oportunidad de disfrutar de una merienda en los salones parroquiales donde pudimos confraternizar los unos con los otros.
Por último, dentro de la celebración de la misa, tuvo lugar la entrada en el Movimiento de Seglares Claretianos como miembros de pleno derecho, por parte de Irene Dorado, Beatriz Alvares-Rementaría y Sebastián García,
los tres pertenecientes a la Comunidad de María de Sevilla. Manifestaron públicamente ante la asamblea allí reunida y en presencia del asesor Regional (Juanjo García, cmf), el asesor de la Comunidad (JA Benítez cmf) y el vocal de formación del Consejo Regional (Pedro Pardo) su firme voluntad de formar parte del movimiento, teniendo lugar la celebración del rito de admisión.
Desde Seglares, queremos dar las gracias al resto de ramas de la Familia por propiciar que encuentros de este tipo dejen tan buen sabor de boca y ya estemos pensando en el siguiente.
Damos gracias a Dios porque nuestra familia claretiana continua creciendo con la incorporación de nuestros hermanos almovimiento, por los momentos de encuentro y por la riqueza de nuestra familia.
Unidos en el Corazón de María.