Como cada año, el IV domingo de Pascua, la Iglesia celebra la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones (JMOV) y ya van 57 jornadas. El Papa se hace partícipe con su mensaje (puedes leerlo aquí) y en la Diócesis de Madrid se celebra realizando una cadena de oración que comienza el viernes por la tarde y termina el domingo con la eucaristía. La Familia Claretiana lleva años participando en esta cadena de oración que se realiza delante del Santísimo en la capilla del Seminario de Madrid.
Este año dadas las circunstancias que todo el planeta está viviendo, no se ha podido realizar de forma presencial y se ha realizado online. Gracias al canal del Equipo Provincial de Animación Pastoral (EPAP) de los CMF, pudimos unirnos a esta iniciativa de la diócesis y participar como siempre hacemos en nuestro horario de 19 a 20 del sábado. José Manuel Suerio, cmf, fue quién dirigió la oración
El esquema de la oración siguió el que venimos haciendo en los últimos años. Extraemos del mensaje del Papa la idea principal, este año las 4 palabras que utiliza para definir la vocación: Gratitud, Ánimo, Fatiga y Alabanza. Con ellas definimos cada instante de la hora de oración que contenía: un breve testimonio de vocación de un miembro de cada rama de la Familia Claretiana, una lectura del evangelio, la explicación del mensaje del Papa a la palabra y se deja un momento importante a la oración delante del Santísimo que acompaña una canción o hilo de música.
Llevo participando y colaborando en la realización de esta oración, como miembro del equipo de la Familia Claretiana representando a los Seglares, más de 7 años y reconozco que este año ha sido muy especial y emotiva.
Dado nuestro ritmo de vida llena de compromisos y actividades, hacía que fuéramos muy poco los que de forma presencial acudiéramos al Seminario a participar de esta cadena de oraciones. Este año, al ser online ha hecho posible que no sólo seglares de Madrid pudieran participar, sino seglares de todo el mundo y también miembros de las otras ramas de la Familia que están destinados en otros países. El ver en el chat los nombres de seglares del otro lado del mundo participando en la oración, me hizo sentirme verdaderamente miembro de una gran Familia Universal, diversa y dispersa, pero unidos muy fuerte al Señor.
Muchas gracias por vuestra participación. Y hasta el año que viene
Inés Crespo, SC